En mi mente siempre funciona, mi cuerpo entra en un estado de inmersión dentro de los párrafos y se esconde entre las letras. Intentar escribir algo que no existe, que no he creado o que simplemente me lo imagino.
No imaginar siempre me resulta mas fácil y menos preocupante, porque imaginarte se vuelve irresistible y seductor pero tan distante; que si el mismo problema, que si no existe problema, que si estas y me quieres o quizás debatiéndome con la idea de que no me deseas. En fin un millón de excusas inexplicables para seguir pensándote. Pero intento escribir cuando no estas, cuando no me ves, cuando no existe nada que me pueda detener y frente a mi se para un recuerdo.
¿Intentar describir?
Describir que? tu manera de ser, quizás la manera en como actuó frente a ti, o como dejo de actuar? y tu lengua palpita y no me deja pensar y tu lengua envenena lo mas dulce de mi boca.
¿Intentar, intentar?
Intento no sentirme, ni siquiera sentirme en ti, aunque tu mano se quede grabada en mi piel intento no sentirme, ni sentirte, la soledad y la espera, la distancia y la espera.
¿Intentar decir?
Que te amo, que inevitablemente no espero nada solo porque no hay nada, nunca fue nada, y todo es poco para describir que hubo algo en este mar de nada.
4 de la tarde y una taza de café, con tu recuerdo, tu mirada, risas leves, picardia y lluvia tenue.
Intento escribir lo que no quiero escuchar.
Escribir, describir, intentar, decir.
¿Intentando extrañar? o ¿Intentando olvidar? Siempre intentando amar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario